jueves, 29 de septiembre de 2016

LA SOBERBIA LOS ANIQUILA...

Los soberbios ignoran que al fin, la soberbia los aniquila...
 
Le dan y le dan a la rosca hasta herirla, no sienten ninguna preocupación cuando se exceden, ni cuando tiran y tiran  de la cuerda hasta romperla sin medir las consecuencias de sus actos.
 
Y todavía después, no se culpan, no entran en la serena reflexión que los pueden inducir a la enmienda o a aceptar responsabilidades para subsanar sus errores, aunque sea con una mínima dosis de ética, no ya de grandeza porque han carecido de ella al no velar por el interés de los más, que somos "nosotros", todos.
 
Han priorizado en su comportamiento social y político, sus ciegas apuestas al "yo" que siempre los ha perturbado.
 
"Al que le caiga el sayo que se lo ponga".
 
Porque además, como lo afirma nuestro Himno Nacional "es el grito que el alma pronuncia" ante el que nos inclinamos reverentes, al rescatar lo que defendemos sin desmayos, la dignidad de "la patria o la tumba" con tal de vivir en plena libertad, "o con gloria morir"..., dado que comprometidos e involucrados como debe ser desde la historia, "sabremos cumplir, sabremos cumplir..."

No es posible renunciar a los principios esenciales, a los ideales. a los sueños que no renuncian a la elevación, ni a los resplandores renovadores que en cada amanecer a todos nos propone la grandeza...
 
Eso es justamente, lo que no hacen los soberbios, los que se mienten bajo el oscuro manto de la insensatez.

lunes, 26 de septiembre de 2016

NO FORMO PARTE DE ESE CAMBALACHE INSENSATO...

Siento que cumplo con mi obligación moral, si me mojo en toda circunstancia, si me juego la piel, si no actúo en mi cotidiano vivir haciendo cálculos de conveniencia, utilizando ademanes zalameros y empalagosos con poderosos que tienen a su alcance beneficios potenciales y poder, que de alguna manera puedan acarrear algún aporte positivo... 
 
 En mis dichos y en mi obrar, mi conciencia me lleva a mostrarme tal cual soy, sin ningún disfraz, sin conjugar verbos que no comulgan conmigo, porque rechazo toda hipocresía y toda cobardía...
 
En definitiva, entrego mi sencillez en todos mis intentos, y como el arroyo, intento bajar de las alturas con los múltiples murmullos de mi mundo interior al discurrir por el pedregal de mis propósitos, buscando el llano, vastedad donde están los más, aquellos con quienes más me identifico, y los que más me han convocado siempre...
 
Yo sé muy bien todo lo que ocurre en las cumbres, en las cúspides piramidales donde suelen refugiarse aquellos amantes de otros amaños.
 
La vida me ha permitido observarlos de cerca y percibir miserias, olvidos y mezquindades que mi alma rechaza, y me ha enseñado también, a verlos venir..., justamente, para ponerme en guardia y tomar distancia de ellos.
 
Aprendí desde purrete que no puedo formar parte de ese cambalache insensato y por eso lo combato como puedo, atribuyéndome una voz que nadie me ha pedido representar, pero que expongo con el propósito de luchar contra las injusticias: de la desigualdad, del desamparo, de las infames explotaciones, de las mentiras que nos mienten, de los depravados sin límites, de los aquellos que montan el siniestro circo corrupto, de los poderosos que decretan las guerras para que mueran inocentes, y de los enajenados mentales que expresan con el terrorismo, ideologías e intolerancias irracionales que estallan un día sí y otro también...
 
Las diversas dictaduras que reinan en este mundo tan mal encarado, con la infaltable ayuda de los mediocres de siempre a su servicio, son las culpables de los nuevos tipos de genocidios que enlutan este presente repleto de martirios, en los que también son perseguidos y asesinados quienes levantan la voz para proclamar el Evangelio del amor que se desea silenciar, para que cada vez más, se siga abriendo la ancha brecha entre el materialismo reinante y la espiritualidad que tantos buscan adormecer.
 
 
 


domingo, 25 de septiembre de 2016

BAJO EL INFINITO DE LAS INTEMPERIES...

En el aula del vivir, si es que la aprovechas bien, se aprenden muchas cosas, aunque haya que pagar por ellas, un alto precio...
 
Bajo el infinito de las intemperies en donde el cotidiano vivir deja huellas imborrables, nos entrenamos para soportar el duro trance de los repechos que al fin hay que ir venciendo, en las sucesivas etapas como pruebas exigentes de una larga travesía por la que paso a paso nos vamos aproximando a un destino, siempre que las claudicaciones no nos paralicen con sus engaños...
 
Hay obstáculos en los diferentes senderos, porque nada, absolutamente nada es gratuito en la existencia. Lo único que se nos da gratuitamente es la vida, con todo su maravilloso potencial, y la fuerza de levantarte siempre si caes por cualquier tropiezo. 
 
Luego, todo habrá que conquistarlo, incluso, no haciendo oídos sordos al llamado que se nos hace y que tercamente nuestros caprichos insensatos nos impiden oír...
 
Como se conquista el amor verdadero, el que no se esconde detrás de  un antifaz, el que no se confunde con falsos idilios pasajeros, el que no se embriaga ante los jolgorios inconducentes, porque es el que ata indisolublemente a las almas que recíprocamente se atraen, anticipo en esta efímera temporalidad de la existencia, de lo que será la  verdadera meta, gloria de un destino interminable...

miércoles, 21 de septiembre de 2016

CON LA IMPIEDAD EN SUS ALMAS...

Hay silencios que son cobardes, y yo no he integrado nunca el equipo en el que se esconden los que no tienen el coraje suficiente de utilizar el verdadero nombre, para identificar a las personas o las circunstancias que las envuelven...
 
No puedo comprender y mucho menos compartir, que existan miserables asesinos sin el más mínimo atisbo de arrepentimiento, con las víctimas y sus familiares como para pedir perdón por lo que han hecho.
 
Les queda grande ese sentimiento de humanidad, que es una prenda moral que nunca van a aceptar, justamente, porque son sinvergüenzas y además cobardes.
 
No puedo comprender y mucho menos compartir, que haya criminales que no lleguen a ser juzgados porque sus crueldades hayan prescripto. Pero, ¿cómo puede aceptarse ese vacío legal incomprensible, y se castiguen otras cosas erróneas pero no tan malvadas?
 
No puedo comprender y mucho menos  compartir, que haya normativas legales que han llegado a indemnizar por parte del Estado situaciones sin duda dolorosas, pero sin la siniestra crueldad de los atentados terroristas, y algunos de estos criminales se paseen por el mundo como si no hubieran hecho nada, y todavía, se endilguen el derecho a postularse para cargos públicos...
 
Esto es indignante, y no lo puedo silenciar.
 
No puedo ni debo dejar de utilizar el verdadero nombre para referirme: a un asesino, a un corrupto, a un violador, a un cobarde traicionero que se endilga derechos que no tiene, a un manipulador que estafa, a un usurero que lucra hasta el despojo y como los buitres, si pudieran, hasta los ojos te arrancan.

Todos ellos con la impiedad en sus almas, sin importarles nada la vida de sus semejantes a quienes también les estafan o les matan sus esperanzas...
 
 
 


lunes, 19 de septiembre de 2016

MIS RECUERDOS NO ME FRENAN...

Suelo tener presente mi ayer, pero mis recuerdos no me frenan...
 
No puedo desatar totalmente los nudos que me unen a mi pasado, y no es que lo sienta ahora que ya tengo  mis sandalias gastadas después de un largo caminar, dado que no he podido vivir desdeñando el pasado, más allá de tener la plena certeza de no frenar jamás mi marcha hacia el futuro de mis sueños...
 
No preciso desatar ninguna circunstancia de mi vivir que pueda enlentecer mi caminar, todo lo contrario. Mis experiencias de vida  que han sido múltiples, estimulan mis vibraciones interiores, redoblan mis rebeldías al multiplicar  la determinación que me guía,  y me confirman una vez más si es que ello es posible todavía, que mi sencillez en el cotidiano vivir es la que me ha permitido alcanzar resplandores que me orientan sin confusiones, hacia mi destino...
 
Es el resultado de serenas y honestas reflexiones en cuanto a qué ha sido de mí y de mis propósitos para el mañana de mis días, sabiendo que si lo intento podré concretar lo no alcanzado, elevarme hacia horizontes nuevos buscando atajos de aproximación, siempre con el convencimiento de esquivar engaños y desvíos que me aparten de los senderos que me indica solamente, la brújula del amor...  
 
 
 
 

jueves, 15 de septiembre de 2016

EN ALGÚN RINCÓN DEL ALMA...

Todos tenemos recuerdos y silencios escondidos en algún rincón del alma...
 
Es natural, es la vida que va dejando rastros, huellas, heridas, y materias pendientes que en el largo camino, la realización no ha conseguido...
 
Circunstancias adormecidas, que están allí, pero no han muerto. Permanecen en nosotros mientras no nos alcance el último suspiro.
 
No me cansaré de repetirlo, la maravilla de la vida es como un lago de inconmensurable potencialidad, en el que convive un universo de vivencias, logros, fracasos, penas y alegrías que, recíprocamente se arremolinan para generar la resultante de una forma de ser, de sentir, de obrar, según la predominancia de sus corrientes interiores para expresar hacia afuera, la personalidad que hayamos podido elaborar desde el libre albedrío, don inseparable que nos vino con la existencia.
 
Es innegable que de nosotros depende el signo de esa potencialidad, al manifestarnos en el decir y el obrar. Se nos ha dado todo, pero no todo es debidamente procesado para que no nos apartemos de los senderos del amor, que el hombre suele abandonar al claudicar ante la presión de sus caprichos insensatos.
 
Por eso el mundo está como está, repleto de declinantes desvíos que nos distancian del buen vivir para llevarnos a una globalidad inentendible, en la que reina el mercado, la mezquindad, la manipulación, la corrupción conductiva, la violencia, los avasallamientos, los múltiples genocidios que atentan contra la dignidad del hombre...
 
Y esa rebeldía que nos sacude que nos viene desde algún rincón del alma, tampoco la podemos silenciar, al ver de qué modo se ofende, se humilla, se odia, se manipula, se desprecia, se olvida al semejante, y se le deja a un lado como si fuera un producto de descarte...
 
Y la presión de ese lago interior explota en algún momento, como explotan las burbujas con los sucesivos soplidos de los olvidos, de la subestimación, la inhumanidad, la codicia sin límites y la insensatez que se respalda en la impunidad mal habida que nos ofende...
 
 
 
 
 
 
 


lunes, 12 de septiembre de 2016

EL SECRETO ENCANTO DE PASAR DESAPERCIBIDO...

Ni siquiera en mi juventud, en esa edad donde se manifiestan inseguridades, tuve necesidad de buscar protagonismo alguno.
 
A mí me enseñaron que hay que transitar por senderos sin engaños, en donde es factible tropezar y hasta caer, pero siempre, levantarse para seguir y seguir sin mirar atrás, y mucho menos buscar notoriedades que no tienen sentido...
 
También aprendí que uno no es quien para adjudicarse atributos, y si alguna elevación se alcanza es razón suficiente para dar gracias e intentar que el vuelo de nuestra flecha pueda alcanzar horizontes nuevos, que después de todo, para eso se nos ha dado gratuitamente la vida.
 
Los esmeros no deben orientarse en falsos protagonismos, sino en el secreto encanto de pasar desapercibido, pues es así como se cultiva mejor la inmensa riqueza que está en la sencillez...
 
Para darse por amor, no se precisan falsos fulgores que al fin no aportan ningún resplandor. Todo lo contrario.

Y eso también lo aprendí cuando en diversas circunstancias de la vida, tuve la triste constatación de aproximarme a seres repletos de oscuros laberintos, en donde se sentían cómodos haciendo cálculos de conveniencia siempre mezquinos, hipócritas que proclamaban una cosa pero hacían la contraria, pero se habían "doctorado" en esa falacia de llamar la atención mientras gozaban exhibiendo el "poder" y el "tener", humillando a otros a quienes consideraban en escala social más baja a la de ellos, "iluminados" pero sin luz...
 
Seres que han buscado "hacerse ver", que se agrupaban entre los de su misma condición, y desde su pedestal de barro, mirar hacia abajo y juzgar a quienes no eran como ellos, ni tenían sus bolsillos repletos, sin llegar nunca a comprender nada, de la inmensa riqueza que puede encontrarse también en la pobreza, cuando se da lo que apenas se tiene...
 


jueves, 8 de septiembre de 2016

TREPADOS A SUS FALSOS PEDESTALES...

Mi libertad por encima de todo, por eso es que no me permito encasillamientos dogmáticos inflexibles...
 
No sé vivir de otro modo, lo aprendí dándome contra mis propios muros hasta que sentí una Verdad en mis entrañas que justamente, me hizo comprender que nunca fui más libre que cuando la fe llenó mis vacíos con sus certezas...
 
Y eso ocurrió hace pocos años, muy pocos, en términos comparativos con mi ya largo vivir, para que yo me diera cuenta que sin saberlo, había vivido en comunión total con las certezas que hoy proclamo a viva voz...
 
En el amplio abanico donde se suscita la existencia (en lo moral, político, social, ético, intelectual, religioso, filosófico), necesito la plena libertad de mis pensamientos con los que orientar mi obrar, mi decir, mi compartir, para ofrecer cuanto esté a mi alcance sin rejas que me aprisionen, ni prohibiciones que me silencien, ni condicionamientos impuestos en las materias que sean, que no cuenten con mis propias valoraciones, procesadas con la legitimidad de mi plena libertad, que me llevan a evolucionar y ajustar mis criterios en base a las circunstancias que el devenir le va presentando a mi sencillez...
 
A mí no me confunden los gritos innecesarios y mucho menos cuando carecen de fundamentos, tampoco me perturban las falsedades de quienes primero se mienten para luego mentirnos, al anteponerse al supremo colectivo dado que nunca el mezquino "yo" podrá vencer al solidario "nosotros", como suprema Verdad en la escena que sea, en Latinoamérica, en  el Continente Africano, en Europa, o en la China...
 
En este presente del mundo, asistimos al triste testimonio de un genocidio tan cruel como los que han quedado en la historia, pero no sepultados en el olvido. Pueblos enteros soportan el descalabro conductivo por el que condenan a movimientos migratorios que sufren la diáspora de la desesperanza, o el martirio de lanzarse a los mares buscando un resplandor para sus vidas...
 
Huyen de las miserias y de las guerras en las que ponen los muertos; son los que soportan el martirio de las crisis que no provocan y son caldo de cultivo para las mafias que lucran con sus desesperanzas como también lo hacen, con el triste negocio de la reconstrucción de las ruinas que dejan los artefactos de muerte.
 
Pero se multiplica también, el descreimiento en la clase política por personas sin grandeza que un día sí y otro también, en la escena que sea, generan dudas, intolerables conductas corruptas, por una impunidad que al mentirse, se creyeron que los cubriría eternamente trepados a sus falsos pedestales...
 
Por más amenazas que surjan, al final, "no podrán impedir al sacudir las ramas del árbol cargado de frutas podridas", que ellas terminen cayendo con el demoledor derrumbe de falsos mitos que a través de los años no han tenido nada de heroicos, sino todo lo contrario.
 
Se han envilecido subestimando la libertad del hombre, porque al fin, siempre, surge en alguien la voz acusadora de la Verdad al desnudo, que les descubre sus tapujos, y se les desprenden los velos engañosos que han creído invulnerables...
 
 
 
 
 
 


miércoles, 7 de septiembre de 2016

UNA ETERNA TRANSICIÓN REPLETA DE TRANSFORMACIONES.

Si lo supiéramos todo con antelación, no podríamos seguir dando pasos en la vida sin ese condimento de avanzar y conquistar, esa ventura maravillosa que es el buen vivir.
 
Pero tenemos el recurso de los sueños, quienes poseemos el coraje de soñar..., y construir el mañana que nos motiva seguir y seguir, hacia los resplandores de nuestras esperanzas.
 
Una cosa sabemos, y es que es muy efímera la temporalidad de la existencia, para que caigamos en la insensatez de desaprovecharla sin dejar huellas en los senderos, donde no transpiramos la camiseta de la vida, ni nos involucramos para que en algún surco crezca una semilla que justifique el don que por amor, nos ofreció la oportunidad de ser y vencer en todo aquello que se espera de nosotros...
 
Vivir mientras permanezca un suspiro en nosotros, es una eterna transición repleta de transformaciones potenciales, es ir en pos de un desafío tras otro, es conquistar etapas aunque no seamos los primeros en llegar a las respectivas metas, dado que el premio del largo trajinar, siempre esperará a quienes no claudican en sus empeños, y excluirá a quienes primero se mienten para después mentir, a los que pretenden justificarse culpando a los demás, sin llegar a comprender que son ellos los que se niegan un destino y cuando no, se auto flagelan... 
 
 
 
 


domingo, 4 de septiembre de 2016

UNAS LÁGRIMAS INVOLUNTARIAS...

Mirando una foto en la que yo era muy pequeño, en medio de mis padres sentados en una enorme roca, pensé muchas cosas que ahora, después de tantos años, me confirman una vez más que son los olvidos los que matan a los seres humanos al apartarlos definitivamente de la vida.
 
Mis padres se han ido, mi madre cuando yo tenía apenas 20 meses, mi padre hace 21 años y yo..., ya casi rozando mis primeros 80 años de vida...
 
Pero ellos no han muerto para mí, apenas se han anticipado en una partida que a todos nos será irreversible, y pueblan esa dimensión en donde también están todos los seres queridos con quienes nos reencontraremos en las parcelas resplandecientes del eterno presente... 
 
Yo no he de partir si no me llaman, no regalo así nomás mi vida como otros que voluntariamente van muriendo poco a poco sin remedio.

No sé si alcanzaré algunas décadas más de mi segunda tanda después de mis primeros ochenta, pero en todo caso, eso a mí me tiene sin cuidado porque aspiro conquistar la plenitud revestida de gloria, para la que lucho sin desmayos.
 
Pero tengo una preocupación, y es provocar tristeza en los míos y aquellos que me quieren, cuando en algún momento suene un clarín con sones irreversibles llamándome, y esa paradoja que siento, felicidad por un lado porque alcanzaré mi destino, y el dolor de presentir el llanto en los seres que me han amado y he amado, porque no estaré allí para consolarlos, por lo cual me he preocupado siempre de elevarme más y más en lo que esté a mi alcance, justamente, para que no me olviden y no me dejen morir del todo en sus corazones...
 
Paradoja que corto aquí en esta entrega, porque unas lágrimas involuntarias se han hecho presente sin mi consentimiento, y nublan la escena que comenzó frente a un enorme montículo de piedra junto a mis padres a quienes miro permanentemente, converso con ellos, les doy todos los días un beso mañanero a los seres que más quiero, como lo hago con nuestro Señor y la Reina del cielo, con mis recados cotidianos y dando gracias una y mil veces...


jueves, 1 de septiembre de 2016

DEJAR ATRÁS LA TEMPESTAD...

Cuando la vida nos envuelve en sacudones, cuando una tempestad nos pretende atrapar, jamás hay que dejar de luchar, vengan de donde ven las razones, y todavía más si es que provienen de nuestros caprichos, dado que si no se claudica, si es que deseamos la vida cargados de esperanzas, debemos tener presente que "no podemos guiar el viento, pero sí cambiar la dirección de nuestras velas..."
 
Con más razón todavía si se ama y se es amado, que es cuando ya no se vive por y para uno, sino primordialmente dejando a un lado el "yo" para ofrecer el ser sin reservarnos nada...
 
"Si vivimos cada día de nuestra vida como si fuera el último, un día acertaremos"; y podremos sentir el verdadero sentido de la vida, y no el despilfarro que en este presente del mundo, nos va llenando de sombras poco a poco con el creciente abandono del sentido común, que nos aparta de los senderos que conducen hacia la realización, y nos pueden  aproximar a los resplandores de la Verdad...
 
Es posible, claro que es posible, pero solamente si lo intentamos.
 
No hay que desesperar, tampoco cruzarse de brazos, puesto que no es suficiente sólo confiar sino involucrarse en aras del despertar, pero..., "jamás hay que desesperar aún en las más sombrías aflicciones, pues de las nubes negras siempre cae agua limpia y fecundante..."
 
Te lo comparte alguien que no se pone como meta dar consejos a nadie, sino decirte cuán útiles han sido los aprendizajes aprendidos en las aulas formales y también aquellas a la intemperie bajo el cielo abierto de la vida, que a tantos les ha servido: "preguntar al hombre con experiencia, y no solamente al hombre con estudios..."
 
Un eterno aprendiz como soy y seré mientras viva, no pretenderé nunca guiar el sentido del viento, pero no olvidaré que a mi alcance estará, orientar mis velas para seguir avanzando, único modo de dejar atrás la tempestad..., y seguir la luz del faro orientador.