sábado, 21 de mayo de 2016

EL FALSO DISFRAZ DE SUS MENTIRAS...

Por haber caminado tanto, no estoy fatigado, estoy de vuelta para muchas cosas, y me impacientan las tonterías y los caprichos insensatos...
 
La coraza con la que me defiendo en la lucha incesante del cotidiano vivir, está revestida con la dureza de la Verdad que nos subyace a todos, y no con la endeblez que tantos exhiben con sus hipocresías.
 
Por eso es que, siempre, se les termina cayendo el falso disfraz con el que se mienten un proceder repleto de mediocridades y fracasos que ya no pueden ni podrán justificar..., justamente, porque hemos aprendido a verlos venir desde lejos, por haber caminado tanto, y estar hartos de tantas falsedades con las que ellos mismos se mienten, para luego mentir...
 
Ya cruzamos muchas veces ese puente, para llegar a otra ribera y apartarnos de quienes han optado por otros rumbos, que no tienen el sentido ni el destino para el que nos han dado la vida...
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

miércoles, 18 de mayo de 2016

UN DESIERTO SECO, SIN VIDA, SIN ALMA...

¿Alguien puede llegar a entender, que "un encuentro cercano" tenga a sus protagonistas a una distancia de 34.649.589 kilómetros de distancia?
 
Pues así es, porque la Tierra y Marte se aproximarán a esa cercana distancia en los próximos meses...
 
¡Qué lejos está el hombre de comprender cabalmente, su real pequeñez!
 
Eso nos lleva a pensar muchas cosas, sobre las posturas del hombre en el cotidiano vivir.
 
No obstante, es una maravilla la vida, y todavía, recibir gratuitamente el enorme potencial que ella encierra, para que muchos se crean lo que realmente no son, y nunca alcanzarán con sus caprichos insensatos, ni con sus odios, rencores, envidias o insultante soberbia.
 
¿Pero de qué pueden presumir quienes viven y se multiplican ocultos en las sombras...?
 
Ellos sí que no estimulan un encuentro cercano ni enriquecen el convivir con sus mediocridades, ni con la insolente soberbia que ignoran su extrema pequeñez, como para entender que no engañan a todos todo el tiempo, justamente, porque apenas son una minúscula partícula de un desierto seco, sin vida, sin alma...
 
 
 
 
 
 
 


sábado, 14 de mayo de 2016

NOS FALTAN RESPLANDORES LUMINOSOS...

El asombro ante lo incomprensible por lo menos para mí, asoma de nuevo cuando me informo sobre un agujero negro que aparece y desaparece en períodos de veinticinco años, descubierto por señales emitidas por la tecnología que ha desarrollado el hombre.
 
Asombro cuando se nos comunica que se trata de "un disco de acresión de 10.000.000 de kilómetros de radio, con erupciones extremadamente luminosas y que está tan solo a unos 8.000 años luz de distancia"
 
"Se captó la presencia de un viento de material neutro (hidrógeno y helio no ionizado), que se forma en las capas externas del disco de acresión, regulando el proceso de cómo el material es tragado por el agujero negro".
 
Yo ante tanta inimaginable vastedad del espacio cósmico, me rindo al comprender una vez más mi pequeñez, porque no llego a comprender cabalmente que ese disco del agujero negro pueda llegar a tener 20.000.000 kilómetros de diámetro, dimensión que supera además, esa constante de la expansión del universo con ese ritmo (acrescente) indetenible que parece no tener fin al menos para mi captación...
 
Ya quisiera yo que esa cualidad estuviera siempre presente, expandiendo nuestro tesón, nuestra férrea determinación de afianzar al hombre, en el cumplimiento del supremo rol del amor en aras de las esperanzas...
 
Es una potencia que está en nosotros, pero en tantos casos adormecida, sin el más mínimo ritmo de "acresión", y por lo tanto, sin alma...
 
Nos faltan resplandores luminosos, y por eso los agujeros negros engullen sin piedad, todo lo bueno que está en el ser humano, para que crezcan las sombras que nos hacen tanto mal...

jueves, 5 de mayo de 2016

NECESITO HACERLE ESQUIVES A LA PARCA...

Siento que dentro de mí, discurren ráfagas que actúan cual inquietos remolinos que sacuden, tantas veces, las aparentes aguas tranquilas del lago interior...
 
Y digo aparentes, porque están repletas de potencias, corrientes que no siempre se manifiestan en el espejo exterior.
 
Pero empujan, cobran rebeldías, se transforman con sus sacudimientos, y entonces, antes que salten las aguas embravecidas del torrente desbocado, la Providencia me sugiere abrir compuertas, para que no me ahoguen los estallidos de la cascada...
 
El ser humano no es una burbuja que explote ante un pequeño pinchazo, es sí, espíritu sufrido que es capaz de soportar heridas que sangran sin parar, demoledoras asfixias, incomprensibles injusticias, para que en un acto singular  se desprenda de aparentes calmas y abandone adormecimientos que soportan presión, y se disponga a actuar antes de que una campanada le anuncie los silencios que llegan con el turno de la partida definitiva.
 
Yo trataré de no oír esa voz de bronce, dado que prefiero me convoquen como dice la canción: "voces de bronce, llamando a misa de once...", porque necesito hacerle esquives a la parca, mientras le ruego a Dios que ella me deje en paz, y tenga tiempo de plasmar todo cuanto todavía no he alcanzado, no he dado, para amar lo que no amé, para gritar a los cuatro vientos que  no me rindo, y resistiré hasta que me llegue el momento de partir...
 
Necesito la vida, yo sé que se me ha dado mucha, pero quiero más y más..., hasta que se me aproxime el último suspiro, que será cuando me llamen en serio, al no necesitarme ya más por aquí...

lunes, 2 de mayo de 2016

APRENDÍ CON GOLPES, Y SACRIFICIOS...

Tengo gracias a Dios, hondas certezas arraigadas en mis entrañas.
 
Que logré hacerlas mías, que legítimamente defiendo, que considero inviolables, y a las que nada ni nadie podrá opacarles el resplandor, ni hollar con sus botas si intenta pisotearlas...
 
Porque no podrán llegar a ellas, al poseer fortalezas que me fui construyendo ladrillo a ladrillo, piedra a piedra, desde niño.
 
Lección que me dieron y aprendí, con golpes y sacrificios a los que me expuso la vida, pero con ellos me fui forjando y adquiriendo dureza, sí, como la del diamante, sustancia a la que no se le puede hacer marcas así nomás..., de modo tal que pudiera salir a la vida con una armadura que ni a traición se le perfora..., dado que estoy persuadido y convencido que no depende solamente de mí, sino de los modelos que han guiado mi sencillo peregrinar, ya largo por la existencia...