sábado, 27 de junio de 2015

Cuando el silencio es cobardía...

Si depende de mí jamás haré una alianza amordazando a la Verdad, cuando el silencio es cobardía...
 
Y mucho menos cuando entran en zona de riesgo quienes vienen detrás, porque sería renunciar a regarles el surco donde deben germinar sus esperanzas.
 
No hay que envolver al engaño en papeles relucientes de falsedad, para que exploten ya tarde las circunstancias que tenemos la obligación de evitar. Es cuando se insinúan los sacudones que terminarán por convertirse en pozos negros, el momento en que debe aparecer la firmeza de una firme llamada de alerta, para que nuestros jóvenes despierten del mareo conceptual al que los lleva la sangre caliente...
 
Será nuestra culpa por el dolor envolvente que después aparecerá, por omitir actuar con coraje cuando dejamos que el silencio se convierta en irresponsable cobardía..., creyendo que por sí solas las circunstancias ordenarán las turbulencias que no nos atrevimos a evitar.
 
Será un pacto diabólico permitir que se aproximen las endemias que están rondando y llenando de sombras la vida de quienes vienen detrás, y una deuda que pesará en nuestra conciencia por las omisiones que un día nuestros hijos y nietos nos señalarán...
 
Por ellos hay que mojarse siempre y desde el alma para que no nos duelan nuestras propias cobardías, ni prosperen las falacias de los silencios cómplices..., por habernos conformado con tolerancias erróneas cuando sabemos que las trampas están diseminadas y exploten con imprevisibles consecuencias.
 
Claro que tenemos responsabilidades y muy serias que terminarán por pasarnos facturas si no cumplimos como es debido, pero quienes más sufrirán serán aquellos que un día, fatalmente, nos vendrán a cobrar con precios de dolor la incomprensible actitud de no actuar cuando fue imprescindible para sus vidas.
 
No puede ser que nos doblegue el que "ahora todo vale..." y omitamos los límites en defensa de las actitudes cuya verdad no tienen tiempos..., es decir, han sido, son y serán válidas para la dignidad del hombre.
 
 

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