Han pasado ya más de quince días desde que el nuevo presidente de los EE.UU., asumiera su cargo, y yo, sin abandonar mi prudente postura y mantener la profundidad de mi observancia en la medida de lo que es posible, expreso un grito de alerta, dado que tengo conciencia de que no todo lo que sucede en los altos niveles de la política internacional le es nítidamente ofrecido a los pueblos del mundo...
No obstante percibo que alguien que ha acumulado tanto "poder" y tanto "tener", a quien todavía el alto cargo como primer mandatario de una potencia tan poderosa, le otorga una inexpugnable protección jurídica al menos durante la duración de su mandato, no debería mantener estilos ofensivos y altaneros fuera de lugar, sino la sencillez de la grandeza que no debilitaría en modo alguno la defensa de sus objetivos en defensa de su lema reiterado de: "América, primero".
Si la razón, la justicia, y la Verdad lo asisten en sus intentos, si sus colaboradores no silencian los frenos que a veces son aconsejables e imprescindibles en los consejeros para detener los atropellos de la soberbia, será posible que las sospechas desaparezcan para que no vivamos todo un período de confrontaciones que nada bien le harán a la humanidad, sobretodo, a los sectores populares y más necesitados...
Este presente del mundo necesita senderos de esperanza, en los que millones de seres puedan transitar hacia un destino mejor, sin necesidad de que las postergaciones le sigan negando derechos esenciales y miserias que arruinen sus vidas sin proyectos, sin un mañana en el que no aparezca el más mínimo resplandor para sus vidas...
El largo vivir me ha permitido ver muchas cosas, muchas actitudes erróneas, muchos latigazos sobre espaldas inocentes, genocidios incalificables, ofensivas soberbias, salvadores que no salvaron nada, pueblos amordazados, crueles dictaduras, que me han llevado a dejar inocencias a un lado y escarbar profundo hasta donde están los cimientos duros sobre los que construir un despertar...
Un despertar que se posterga por parte de quienes están en condiciones de hacerlo, pero que lamentablemente se dejan a un lado por oscuros designios sin alma...
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