Más allá de sentir que todo cuanto intento, está teñido por la pátina de mi FE, que no niego ni oculto, al dirigirme a mis semejantes todos, fundamentalmente a los que habitan en los llanos de los que orgullosamente provengo, y han sido quienes más me convocan, tengo suficientemente claro que me estoy dirigiendo a creyentes y no creyentes, porque para mí, que viví la mayor parte de mi vida de espaldas a Dios pero sólo de palabra y por ello sé muy bien lo que sostengo, cada quien tiene "un momento", "su momento", para sentirse invadido por el sagrado baño de la FE y el AMOR, como me ocurrió a mí, sin necesidad de explicar nada a nadie, ni siquiera explicármelo, por son sencillamente, axiomas del alma...
Cuando con los años logré vencer las trabas y derribar los muros que me apartaban porque así me lo habían inculcado desde purrete, poco a poco fui descubriendo que yo había vivido en común unión con esos valores del alma, que me llevaron a concluir que lo esencial es sentirlos en el cotidiano vivir y por ello, obrar desde mi sencillez, Confiando en ËL por supuesto, pero asegurarle también, "Confía en mí..."
Nuestros pensamientos justifican nuestro obrar, y "en nosotros está resolver el punto crítico" de aprovechar esta maravilla que es la vida, mientras nos aproximamos a nuestro destino soñado, o malgastarla cuando nos alejamos de quien nos lo ha dado todo, privándonos del resplandor de la Fragua Inextinguible del Amor, por haber optado por un transcurrir poblado de tinieblas...
Rechazo a quienes me han saturado con sus propias mentiras, y sus propios fracasos, culpando siempre a los demás, para justificar lo que es injustificable, que es no mirar hacia adentro de sus entrañas, porque allí se esconden agazapadas: sus derivas conductivas incomprensibles; sus hipocresías; sus desmedidas ambiciones: las inclinaciones perversas cuando toman distancia del socialismo moderado; las actitudes mezquinas que intentan destruir lo que en décadas de grandeza se conquistó: la confusión de algunos que no son pocos, de sobrevalorarse subidos al carro de una intelectualidad mal aprovechada; creyéndose en tantos casos, los elegidos salvadores de la especie, y levantar falsos altares ante los que se arrodillan, cuando han vendido sus almas al servicio de poderosos que los han comprado al saber que se venden al bajo precio de la desvergüenza, por dineros que nunca se podrán llevar, porque no hay mortajas con bolsillos..
Hay una VERDAD. la VERDAD, del AMOR: "...A LOS RICOS (indiferentes) LOS DESPIDE VACÍOS, Y A LOS POBRES (pero ricos de espíritu en su pobreza) LOS COLMA DE BIENES..."
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