domingo, 27 de enero de 2019

JULEN..., Y EL MILAGRO ANTES DE SU RESCATE...

El día 25/1/2019 registré:

Lo que nos tiene lamentablemente en vilo desde hace tantos días, es el complejísimo tema del rescate de Julen de las profundidades, en el que tantos nos aferramos a la esperanza de un milagro...

Desde hace pocos años (setiembre/2001), yo llegué a "creer sin ver", no necesité de milagros, y si de alguna manera los hubo para la transformación que se operó dentro de mí, no me retrotraigo a ese hecho como si fuera un mérito que nunca en ningún sentido, me he adjudicado.

Lo traigo a este presente simplemente, para dejar constancia de una realidad, de una circunstancia en la que seguramente no intervino mi voluntad, sino que estoy convencido fue obra de la Providencia que a todos nos subyace, o del milagro divino por parte de quien nos existen los imposibles...

Y ahí, justamente, surge la esperanza.

El caso tremendo del niño Julen que cayó en un pozo profundo y cuyo rescate se intenta, está llegando a sus últimos tramos con la aproximación de los mineros al angelito, me llevan a meditar qué es lo que muchos llegarán a pensar, si es que finalmente se ubica al niño con vida...

Esperanzas por las que tantos rezan (yo incluido), dada la cantidad de días que han transcurrido desde que Julen con dos añitos se deslizó en el estrecho y profundo pozo, con el incomprensible tapón que luego se formó sobre él...

Cuando el poderosísimo taladro del don de la fe, perforó las duras rocas de mis tapones interiores, para matar también mis tercas sorderas, y la fe inundara los oscuros laberintos de mis entrañas, yo llegué a "creer sin ver", y en ese entonces, pensé hasta que comprendí mi error, que no necesité de milagros...

Pero es justo pensar y agregar, que otros semejantes no piensen ni lo sientan así, y necesiten del obrar de un milagro divino, como el que ahora se proclama por la vida del inocente...

Como las noticias nos dicen que los mineros que han descendido se aproximan con esperanzas hacia él (están a poco menos de medio metro) y a pocas horas antes de que ello ocurra finalmente por el tiempo del proceso de cada detonación y los tramos de enorme dureza que se interponen, que valgan estos esfuerzos humanos y enormes despliegues técnicos por rescatarlo, para que Julen con vida retorne de la profundidad; o si ello si tristemente no fuera así, se convierta en un símbolo vivo y contundente para que muchos semejantes (en uno u otro desenlace), lleguen a aceptar que el milagro divino pueda devolverlo a la vida, o que el precio pagado por el martirio del angelito, haga reflexionar a los que necesitan "ver para creer" con manifestaciones concretas, que el Señor no tiene la culpa de las barbaridades que el hombre deja con sus calamidades irresponsables, atentando contra la vida y la seguridad de sus semejantes....  

No hay comentarios:

Publicar un comentario