Llegan a tal nivel de falsedad, "para quedar bien con alguien o con los demás, pero también ante quienes los chantajean y los compran, como baratos que son..."
Entonces nada les importa, descender a el submundo de las cloacas..., al que tantos se han acostumbrado que ya ni su hedor nauseabundo sienten, ni los perturba, dado que sólo persiguen la impunidad que les otorga el poder que ostentan, el dinero que reciben por sus ambiciones, al dejarse comprar por magnates en aras de imponer sus ideologías erráticas, en las cuales la grandeza, la superior vocación de noble servicio debería ser cuasi un apostolado en favor de sus semejantes, "brillan..., pero por su ausencia..."
Me resulta intolerable mantener en silencio tanta miserable falsedad...
Tantas mentiras, tanta hipocresía, como arrodillarse cobardemente frente a los altares y condiciones que les imponen, quienes los chantajean y los obligan a "dialogar en una mesa de negociaciones" sin ocultarles que de "cualquier modo" seguirán adelante con sus atropellos, sus insultos, en pro de los imposibles que persiguen, y por los cuales "algunos que no son pocos" ya han sido juzgados y condenados con penas carcelarias, y otros, fugados de la Justicia...
Como a mí lo que más me interesa es "quedar bien conmigo, con mi tranquilidad de conciencia, en total coherencia con la lucha inclaudicable a la que me apliqué desde purrete,", y así lo haré mientras un suspiro permanezca en mí, siempre transpirando la camiseta con pasión, hasta sentir que me ha quedado pegada al alma...
Pongo en esa actitud mis convicciones, y también, mis rebeldías, en un obrar inclaudicable que también asumí desde purrete. Me lo transmitieron los míos, y lo consolidé en mi largo vivir, para no permitirme la cobardía de esconderme detrás de una simulación, o de un disfraz con burda hipocresía...
Y a esta altura de mi vida, ya no me confunden fácilmente, porque debidamente entrenado, he vivido los presentes de mi acontecer, subido al ring donde se pelea la vida desde mi sencilla humildad, sin arrugarme nunca ante nada ni ante nadie en ninguna circunstancia...
He recibido muchos golpes, que todavía me duelen, pero no han logrado voltearme...
He suportado desengaños con heridas que sangraron mucho, pero han cicatrizado, y están visibles allí, para que no las olvide...
Tengo asumido que he tomado medidas para tomar distancia de algunos, pero sin rencores, para rescatarme....
Pero también entiendo que por mis dichos, mis registros escritos, mi permanente obrar cotidiano en total coherencia con las certezas y modelos a los que me abracé sin silenciarme ni claudicar, también me han llevado a asumir que no soy prenda de oro para todos, principalmente ante quienes he lanzado mis dardos acusadores, mis sospechas, mis broncas, y mi lucha frontal, por sus perversidades y sus atropellos...
En cada presente de mi ya largo vivir, fui dejando en mis ensayos, en mis novelas, en mis misceláneas del alma, en la diversidad de artículos y aportes para coloquios y encuentros tertulianos, en conferencias a las que fui invitado, en las entradas de este Blog, testimonios de mi sacrificado caminar, tantas veces ante empinados repechos, con viento en contra, o mar adentro remando en aguas embravecidas que me querían engullir, y siempre, siempre la Providencia, puso a mi alcance un madero salvador propiciando mi rescate....
Y lo ha hecho con la generosidad de hacerme creer, que eran exclusivamente míos mis intentos, pero yo nunca me lo creí. Puse algo más, es cierto, pero lo más valioso me lo han dado, como me han regalado la vida junto a un valiosísimo potencial, para poder levantar vuelo...
Entonces, cómo voy a silenciar las aberraciones que encierra "el submundo de las cloacas, a las que tantos bajan a esas miserias por miserable ambición....
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